Aunque no soy muy afecta a usar joyas con piedras preciosas, hay una en especial que merece todas mis excepciones: el rubí. Además de ser de color rojo -el de la pasión y el amor-, a esta gema se le atribuyen poderes místicos que nos protegen de ataques y accidentes. Por otro lado, al ser una de las piedras más resistentes (solo superada por los diamantes), carece de esciciones que provoquen su rotura.
Por todas estas características, no debemos perder la oportunidad de lucir una alhaja con rubíes. Así que estando a vísperas de celebrar el día de San Valentín, tenemos el pretexto ideal para sacar a relucir toda su fuerza y romanticismo en nuestro look para esa fecha.
Si somos supersticiosas o nos sentimos más seguras teniendo un amuleto, podemos portar un llavero en forma de escarabajo con aplicaciones de rubíes. Además de tener un aspecto muy simpático, este animalito ayuda a absorber las malas vibras, sobre todo en cuestiones económicas. Por si fuera poco, el armazón de plata realzar su esplendor de una manera muy elegante. Personalmente, lo llevaría en mi necesser:
Sea que estemos comprometidas o no, los anillos son una joya que a todas nos encanta -no sé si tanto a nuestros compañeros del sexo opuesto, salvo que sean magnates- porque a pesar de su tamaño pequeño gozan de un gran encanto y poder de seducción. Como muestra de sus atributos, les dejo este modelo de oro blanco y la gema roja en forma de escudo. Disfrútenlo (virtualmente) y sugiéranle a su novio uno parecido al menos:
Además del oro blanco y la plata, la plata quemada también destaca con clásico glamur el aspecto de los rubíes, que como muestra la imagen, adornan con precisión este juego de pendientes y collar con dijes de flores. Sin pensarlo dos veces lo llevaría a una cena romántica nocturna a la luz de las velas. ¿Alguna proposición a la vista?
Si quieren colocar a sus complementos una joya que combine con el juego anterior, este prendedor puede ser una buena alternativa no solo gracias a su forma, sino porque también tienen pequeñas piedras de efecto tornasolado que realzarán nuestro esplendor femenino a cada paso:
Pero si de marcar la pauta romántica se trata, los brazaletes resultan una de las alhajas más imponentes y distintivas, especialmente cuando se combinan con eslabones calados de plata quemada. Sin duda, un regalo altamente apreciable (soñar no cuesta nada):
